Especialmente en las variedades de cultivo exterior más resistentes pueden ser espinosos. No obstante, tendemos a preferir estos frutos cuando están verdes y no maduros.
Los pepinos son originarios del sur de Asia, y fueron cultivados por los antiguos griegos y romanos, a pesar de que las primeras variedades eran extremadamente amargas y eran utilizadas para fines medicinales que culinarios.
Beneficios y propiedades de los pepinos
Como de buen seguro habrás comprobado ya, en especial si, como te comentamos al comienzo de este artículo, en alguna ocasión has comido una buena ensalada, una de las propiedades del pepino es que se trata de un fruto refrescante, que calma la sed.
Tiene un gran poder saciante, ayudando a satisfacer el apetito. Por este motivo, el pepino es recomendado tanto en dietas de adelgazamiento en sí como en personas que padecen obesidad.
También es recomendado para las personas diabéticas, porque posee una baja cantidad de azúcares y de hidratos de carbono.
Además, no debemos olvidarnos que por su alto contenido en agua es un alimento sumamente diurético y depurador de la sangre, a la vez que cuenta con propiedades ciertamente laxantes. Por ello, es igualmente ideal para personas con estreñimiento.
Valores nutricionales de los pepinos
100 gramos de parte comestible aportan:
Kilocalorías: 13
Hidratos de carbono: 2,2
Proteínas: 0,6
Grasas totales: 0,2
Fibra: 0,9
Colesterol (mg): 0
Vitaminas: (A, retinol: 28 / B1, tiamina: 0,02 / B2, riboflavina: 0,03 / B3, niacina: 0,2 / B6, piridoxina: 0,04 / C: 8 / E: 0,1).
Minerales: (Sodio: 8 / Potasio: 141 / Calcio: 15 / Fósforo: 23 / Magnesio: 8 / Hierro: 0,5 / Flúor: 0,02).
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